lunes, 26 de junio de 2006


Próxima estación: Cáceres. Casi no puedo creerlo. Han pasado... ¿cuántos? Cuatro años y algunos meses y, eco que a la doble vuelta, el miércoles estaré de nuevo allí. Supongo que, al regreso, traeré historias e ideas frescas, frescas, para escribir en el blog. En caso contrario, siempre me queda el fácil recurso de escribir alguna tontería, poner algún poemilla del G.A. o publicar fotos de mi tercera boda.

viernes, 23 de junio de 2006

Quisiera escribir sobre un tema mayúsculo, quisiera escribir sobre tu suicidio pero es pronto, muy pronto, para pensar en lo que pudo llevarte a buscar tu silencio (no me atrevo a decir comprar pero es lo que pienso). Me cuesta reconocer ahora que yo también lo he pensado, que todos lo hemos pensado y, mientras tanto, no dejan de acudir a mi cabeza las tabernas San Eloy, aquella plaza donde estaba el bar Las Dueñas, los jueves de jazz, las interminables conversaciones en los pasillos. Qué aburdo es ahora todo esto, qué absurdamente sentimentales, qué inútiles estas palabras. De nada sirven ahora las palabras. Curiosa sensación: demasiado pronto y, sin embargo, demasiado tarde.

miércoles, 21 de junio de 2006

En agradecimiento de la buena acogida que tuvo este poema por parte de mi amigo Ignacio Vallejo, lo publico en el blog:

Homenaje a Juan Ramón

De cada agujero sale
JRJ



De cada ventana sale

una noche derramada.

Entre el rumor de farolas,

despierta la madrugada.


Acompasado, electrónico,

el tráfico se desata

y silbo una melodía

que, calle abajo, se escapa.


Los coches se desperezan,

los semáforos en ámbar,

se escuchan voces hablando

de cosas sin importancia


y una sirena compite

con mi canción despistada,

llenando todo el paisaje

de luces anaranjadas.


El amanecer sorprende

a la más terrible fauna

aún sedienta de noche.

En sus mejillas, hay lágrimas.


Enrique Zumalabe


martes, 20 de junio de 2006


Una vez más, y por desgracia, la actualidad da frío...